Atardecer

10 de junio de 2013

     Hay un punto donde el mar se confunde con el cielo, y las nubes se tiñen de rosa. Se desfiguran mientras desaparecen formando figuras oscuras y misteriosas. Las olas bañan de agua la costa mientras crece la espuma. Las pocas y sabias personas que quedan lo miran. Las otras solo esperan irse, dando por sentado que otro vendrá. Nosotros miramos cada momento, cada segundo, hasta que se esconde en el oeste. Le da paso al magno satélite blanco con sus luceros de compañía.

      Otro día se va y se va con recuerdos. Memorias vividas de un día imperfecto pero glorioso, a su manera.